lunes, 14 de abril de 2008

Abducción con tres delicias



Leo una noticia en la que se cuenta que, al parecer, multitud de personas a lo largo de toda España han podido observar luces extrañas en el cielo. El fenómeno se ha producido en La Coruña, Burgos, Valencia, Huelva y... Madrid!

Me cago en tó lo que se mueve, por qué nunca estoy en el sitio adecuado en el momento justo? Es que mira que tengo mala suerte con ese asunto... Una vez incluso estaba en el sitio y en el momento, pero mirando para el lado que no era, hay que joderse, así que pasó el ovni y lo vieron todos menos yo, coño, coño.

Hace años que estoy deseando establecer algún contacto, pero no hay manera. Mi hermana, que sí que ha disfrutado de un feliz avistamiento la suertuda y pelotuda de ella, tiene la teoría de que hace milenios que ya están entre nosotros acechando y, poco a poco, se preparan para saltar sobre nuestras chepas e invadirnos. Según ella son los chinos, y yo cada vez me lo creo más. Cuando estás en la calle o en el metro, miras a tu alrededor y te das cuenta de que están por todas partes, y son tan rarunos... pelados y paliduchos como pollos de goma, y tan igualitos... Hay tantas leyendas urbanas sobre ellos, como lo de que no mueren por causas naturales, o que no se ven chinas embarazadas y sin embargo hay mogollón de niños, que da que pensar. Y todos esos artilugios luminiscentes que fabrican obsesivamente, qué crees que son sino réplicas de juguete de sus avanzados aparatos tecnológicos, armas incluidas. Algo chungo sí que tienen, no?

Lo que viene siendo la invasión propiamente dicha:



Y éstos son sólo 100, imagínate cuando vengan los 1.300 millones (aprox) que son. Vamos a flipar.

Ahora, además de tener que decidir con cuál religión me quedo al final, también tengo que pensar si me voy a pasar a las filas chinoalien rapidito o si me quedo en la resistencia. Jótér, luis, yo solita, eh?

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